El director chileno-español asegura que el covid fue el verdadero handicap del rodaje de la serie
«Para mí es un proyecto más», nos dice el director y coguionista de La Fortuna cuando le preguntamos si siente una presión extra por que se le coloque constantemente eso de «La primera serie de Alejandro Amenábar». Su ficción de aventuras, basada en el cómic de Paco Roca El tesoro del Cisne Negro, llegó a Movistar+ el pasado viernes y continúa semana a semana su emisión. «Es verdad que cuando haces algo a lo que no estás habituado a hacer te sientes un poco como un intruso, pero también lo haces desde el respeto».
«Desde que empecé en esto del cine he sido intruso de todo: me he metido en la música, en el montaje, empecé a hacer películas cuando todavía no había terminado la carrera…», continúa explicando, «Siempre he sido un poco intruso y aquí he llegado tardíamente a las series, pero lo he hecho con todo el respeto del mundo e intentando hacer una serie y nada más que una serie». Eso de «tardíamente, pero» nos suena a que la puerta a nuevas producciones seriadas se ha abierto, algo que confirma Amenábar: «En general todo lo que tenga que ver con la ficción, ya sea un cortometraje, un anuncio o un videoclip, que he hecho alguna vez, me gusta. Siempre depende de a dónde te lleve la historia. En este caso nos llevaba de modo natural a seis episodios. Podrían haber sido cinco, cuatro, pero fueron seis y es algo que además yo puedo abarcar como director y como espectador me resulta fácil poder ver una serie limitada de no demasiados episodios. No le cierro las puertas, por supuesto».
Alejandro Amenábar valora positivamente la experiencia y, aunque ha tenido que enfrentarse a rodajes submarinos (y asegura que el agua le causa terror), secuencias de batallas navales o grabaciones internacionales, para él el gran reto de La Fortuna ha sido otro y está relacionado con el covid: «El reto ha sido cuantitativo, aguantar física, pero, sobre todo, psicológicamente durante tantos meses. Al estar en plena pandemia, sabía que si yo caía o daba positivo alguna semana, o alguno de los protas, el rodaje se retrasaba y había que parar. Lo hemos visto en rodajes que partían a la vez que nosotros, se lanzaban al mar y se iban interrumpiendo de vez en cuando. Ese era el mayor reto, casi diría el psicológico».
Así pues, cuenta que se tomó muy en serio la responsabilidad de no contagiarse de covid: «Intenté no mezclarme ni siquiera con mis amigos, vivir en una especie de burbuja en el set. Me relacionaba con el equipo, pero luego comía alejado de la gente para no contagiarme. Esa ha sido la mayor presión, el resto ha sido realmente maravilloso, hemos tenido muy buen ambiente de rodaje, hemos tenido mucha suerte con la climatología, con las contingencias del covid y mucho apoyo de las instituciones», concluye.
‘La Fortuna’ se emite los viernes en Movistar+.