Actualidad 24 Feb
Alargar la vida útil de los celulares y animar a los clientes a reutilizar y reciclar dispositivos antiguos es el objetivo de una campaña de la empresa de telefonía móvil Vodafone, en Europa, para evitar así la emisión de toneladas de dióxido de carbono (CO2), el principal gas de efecto invernadero responsable del cambio climático.
En un contexto global caracterizado por un acelerado recambio tecnológico asociado a la obsolescencia programada de los productos eléctricos y electrónicos -es decir, cuando los fabricantes planifican una corta vida útil de sus productos-, la propuesta busca acercar a la industria de la telefonía móvil hacia una economía circular.
De esta forma, conservar un teléfono durante un año más podría disminuir el impacto de CO2 de su vida útil hasta un 29%, mientras que la compra de un móvil reacondicionado reduciría 50 kg de CO2 y evitaría además la extracción de 164 kg de materias primas, asegura la empresa.
Se podrían evitar así más de 50.000 toneladas de emisiones de CO2 por cada millón de teléfonos inteligentes que Vodafone recibe a través del intercambio y que posteriormente son reacondicionados y revendidos.
Uno de los ejemplos que brindó la empresa, es el de un iPhone 12 de 64GB, con un ciclo de vida de 68kg de emisiones de CO2, donde el 83% corresponde a su producción.
Los clientes podrán canjear los celulares que hayan dejado de funcionar, reciclarlos o donarlos a causas benéficas, con ayuda de la compañía francesa de reacondicionamiento Recommerce.
Matilde Moyano