«Hay intención política para digitalizar los votos»: ¿adiós al sistema tradicional de elecciones?

2023 va a ser un año movido en el terreno político: la mayoría de los españoles podrá votar en unas elecciones municipales, unas autonómicas y unas generales. Los dos primeros eventos se celebran el domingo 28 de mayo y, en diciembre, los ciudadanos podrán acudir otra vez a las urnas para ejercer su derecho a voto y elegir sus candidatos al Gobierno de España.

Como suele pasar cada cuatro años, estos usuarios acudirán a los colegios electorales para introducir su voto en una urna, y aquellas personas que no puedan hacerlo de forma presencial tendrán que recurrir al voto por correo.

«Aparecen votos nulos en los sobres —nos referimos a los no intencionados—, se pierden urnas e incluso no llegan a tiempo aquellos votos desde diferentes partes de España o el extranjero», comentan desde la empresa Vocdoni, que ofrece soluciones para la organización de todo tipo de votaciones, desde elecciones o referéndums hasta otras más complejas como Asambleas Generales, Juntas de Accionistas o presupuestos participativos. 

El sistema que utiliza esta compañía en concreto consiste en un «protocolo de voto digital avanzado con las máximas garantías de seguridad, privacidad, transparencia e integridad», ya que «cumple todos los requisitos legales vigentes» para reuniones estatutarias y del nuevo Reglamento General de Protección de Datos Europeo (GDPR, 2018).

Para llevar a cabo esta tarea, la entidad utiliza tecnologías descentralizadas y de código abierto a través de su propio protocolo de infraestructura, su propia app —una plataforma de voto web que ejecuta votaciones de forma sencilla— y su propia API (un punto de acceso a la infraestructura de voto mediante un conjunto de herramientas desarrolladores como APIs y SDKs).

Ferran Reyes, Communication Lead and Product Marketer de la compañía, explica para 20Bits que se trata de un sistema «verificable» para «evitar la manipulación«. Esta solución anonimiza el voto con criptografía de conocimiento cero y es de código libre para que cualquier persona del mundo pueda comprobar que esa votación cumple con las garantías necesarias. 

Después es la propia empresa quien se encarga de todo el proceso de recuento, es decir, ofrecen un servicio integral desde la creación de las votaciones hasta la obtención de los resultados.

Un mercado de difícil acceso y con muchas barreras, sobre todo mentales

Reyes señala que «no es una tecnología que traiga mucha confianza de entrada, pero los ayuntamientos empezaron a usar nuestro sistema de votación y fue todo un éxito». 

Inicialmente, la primera barrera que tuvo la compañía fue que empezaron con una app móvil, pero obviamente esto incluía la exigencia de tener este tipo de dispositivo y tal vez no todo el mundo lo tiene. «Tras analizar este error saltamos a un modelo de votación vía web utilizando credenciales como el DNI y la fecha de nacimiento«.

Ejemplo de voto digital: elecciones en Cataluña 14-F y proyecto 14 Frutas

Con el objetivo de visibilizar su tecnología y el alcance la misma, hace dos años esta empresa puso en marcha lo que denominó ‘Proyecto 14 Frutas’. «Se trata de una iniciativa que movimos coincidiendo con las elecciones al Parlamento de Cataluña para demostrar que la tecnología existe, a pesar de la falta de voluntad por integrarla», explica Marta Sancho, Project Manager & Support en Vocdoni.

«Nosotros lanzamos un juego donde hacías tu propio partido político vinculado a una fruta y preparamos una encuesta para votar con el certificado digital que emitían en Cataluña. La votación se abrió al mismo tiempo que un colegio electoral, se cerró a la hora y el recuento de 2.000 votos se obtuvo en cinco minutos«.

¿Cómo funciona el recuento de votos?

La tecnología blockchain funciona como una urna digital porque los votos ya están dentro. La diferencia es que a nivel tecnológico puedes procesar la información mucho más rápido, sin embargo, los votos necesitan una llave de desencriptación para hacerlos públicos a la hora de contarlos. Este proceso no es muy costoso a comparación de la parte física donde hay que sacar todos los votos de la urna.

Si la tecnología ya funciona, ¿sería posible ejecutarla en unas elecciones generales?

Sancho afirma que «se requiere cierta voluntad política para implementar este tipo de identificación, asimismo, sabemos que hay intenciones de testearlo y ganas de introducirlo. Por poner un ejemplo, con la candidatura de los Juegos de Invierno en Aragón y Cataluña de 2023, se le preguntó a los usuarios vía votación digital si estaban de acuerdo o no con la celebración, pero desafortunadamente, no sucedió así. Está la voluntad para dar el paso y es importante empezar con pequeñas pruebas antes de hacer unas elecciones generales».

«Hay voluntad con este tipo de acciones para empezar a digitalizar las votaciones»

Beneficios a largo plazo

Desde la compañía enumeran los siguientes beneficios que podría tener realizar unas elecciones digitalizadas:

  • Evitar las cartas que no llegan desde el extranjero y la pérdida de urnas.
  • Los usuarios con habilidad digital podrán participar de una forma más sencilla.
  • El proceso de las elecciones sería más económico.
  • La gente podría votar desde cualquier parte del mundo y probablemente aumentaría el porcentaje de votación.
  • No habría diversificación.
  • Se garantizaría la fiabilidad y verificación.

Aunque por el momento no existe ninguna propuesta real en el Congreso o en el Senado, ni en ninguna otra cámara oficial, de implantar las votaciones digitales como parte del sistema de elecciones en España, con tecnologías como la de esta compañía queda claro que digitalizar la manera en que ejercemos nuestro derecho al voto es posible —y, tal vez, más práctica para algunos—.

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