Cine y series 13 May
Hace algunos días, Marvel anunció con un video emocionante todos los estrenos que se vienen, arrancando con Black Widow el 9 de julio, Eternals, el 3 de septiembre, y Shang-Chi and the Legend of the Ten Rings, el 5 de noviembre. Sin embargo, según informó el medio Variety, estas fechas podrían no cumplirse en China.
En el día de ayer, el CCTV6 China Movie Channel emitió una lista de las fechas de estrenos provenientes de Estados Unidos, y si bien incluyeron a Black Widow, dejaron de lado a Eternals y Shang-Chi y la Leyenda de los Diez Anillos. Estas dos películas tienen una relación directa con China que podría ser la causa de dicha falta.
Por un lado, Eternals es dirigida por la ganadora del Oscar Chloé Zhao (Nomadland), de ascendencia china, y que es persona non grata en su país luego de declarar que se trata de “un lugar donde hay mentiras en todas partes”.
Por el otro, Shang-Chi será la primera cinta del Universo Cinematográfico de Marvel sobre un superhéroe asiático, que además de todo, es protagonizada por Simu Liu, nacido en China. En este caso, el conflicto tiene que ver con una cuestión de representación y nacionalismo. Por un lado, el personaje Fu Manchu, villano de los cómics originales, fue siempre criticado por ser un personaje que encarna prejuicios racistas y si bien fue eliminado de la nueva película, muchos en China parecen no estar al tanto, o creen que el personaje de El Mandarín, por el que fue reemplazado, es igual de criticable.
Otro motivo que pesa sobre esta película es el aspecto de los actores: muchos comentaristas chinos criticaron a Liu y Awkwafina por no cumplir con los estándares típicos de barbilla delgada, nariz alta, piel pálida y doble párpado de la belleza china ideal. Una de las críticas más polémicas decía que Marvel los había elegido porque “discrimina la apariencia de los chinos”.
Aunque la omisión del canal chino no es una confirmación de su prohibición, se trata de un gesto no menor, considerando su procedencia. La agencia está bajo la jurisdicción del poderoso departamento de propaganda de China, que tiene la última palabra sobre la aprobación de las películas, especialmente, aquellas hechas en el extranjero. Que estas dos producciones, que son justamente las que más podrían resonar en los espectadores chinos, sean las que enfrentan temor a la censura resalta la dificultad de introducirse en el mercado cinematográfico más grande del mundo.
Rose Bouzon