Con Halloween a la vuelta de la esquina, repasamos las referencias de ciertas ficciones para generar terror
Siempre se ha dicho que hacer comedia es más complicado que generar terror, sin embargo, ambos géneros requieren una buena estructura detrás para conseguir su objetivo. En el terror en concreto, hay muchas series estadounidenses que, para crear ese sentimiento en el espectador, se han centrado en utilizar el folclore, aunque dándole una vuelta de tuerca. Es el caso de Monsterland, una antología de terror que estrena AXN NOW el 29 de octubre. Esta ficción está basada en los relatos cortos de Nathan Ballingrud, que ha utilizado numerosas referencias culturales, creencias y leyendas para construir historias de miedo, a las que les ha dado, además, un toque personal.
Fascinación desde pequeño
La ficción que estrena AXN NOW se basa en la obra corta de Ballingrud titulada North American Lake Monsters. Para su autor, la fascinación por el género del terror le viene desde muy pequeño cuando leía todo tipo de historias de brujas, casas encantadas y piratas. «El primer libro que recuerdo que me encendió el corazón fue una historia ilustrada de Ruthanna Long llamada Brujas, fantasmas y duendes: una búsqueda espeluznante del gato de Miranda«, afirmó en una entrevista. Por esta razón, desde una edad temprana desarrolló un amor profundo por este tipo de historias y, conforme se hacía mayor y leía más obras de este tipo, más le picaba el gusanillo de escribir las suyas propias.
Un nuevo enfoque a lo ya creado
Después de haberse empapado desde pequeño con historias de miedo y tras recoger aquellos elementos que más le llamaban la atención, Ballingrud decidió darle una vuelta de tuerca para aportar a sus historias un toque más personal. Mientras que otros autores de este tipo de género, incluso de ciencia ficción o fantasía, no confían en incluir grandes elementos de realidad, Ballingrud opina todo lo contrario. Para él, lo interesante de este tipo de historias es ubicarlas dentro de un contexto realista en el que lo sobrenatural pase a un segundo plano. En North American Lake Monsters se ha interesado en mostrar la parte más cotidiana de sus personajes y es precisamente ahí donde reside el horror. Para él, sus obras son «pequeños picos de género en historias muy literarias», que se centran en mostrar los defectos de las personas, sus secretos, la culpa, la soledad…
Libertad a la hora de crear monstruos
Otro de los elementos a los que Ballingrud ha dado una nueva visión, y que podremos ver por consiguiente en Monsterland, es la renovación de aquellos monstruos que consideramos folclóricamente de determinada manera. Por lo general, después de muchos años viendo a criaturas sobrenaturales representadas en el cine y la televisión, cuando pensamos en una sirena, un hada, un vampiro o un hombre lobo, siempre los imaginamos de una forma en concreto. Sin embargo, Ballingrud también quiso darle una vuelta de tuerca a estos conceptos en su obra. En North American Lake Monsters se han incluido hombres lobo como una alguien joven y delgado, sirenas con un aspecto completamente diferente a lo que estamos acostumbrados e, incluso, ha creado una especie de mezcla entre un vampiro y un caníbal.
Aquellos que le han inspirado
Para crear sus propias historias de esta forma tan personal, Ballingrud se ha visto influenciado, directa o indirectamente, por aquellos maestros del horror con los que ha crecido desde joven. La referencia más clara para el escritor ha sido Stephen King, pero también ha aprendido de otros como Peter Straub, Clive Barker o Robert McCammon. De este último ha cogido la idea de experimentar con los géneros y unirlos. Una de las obras más vendidas de McCammon, La hora del lobo, era una historia de la Segunda Guerra Mundial que combinaba espías con hombres lobo. «Realmente admiro a los escritores que son capaces de unir los placeres del género con las ambiciones de la literatura. Quiero poder leer sobre monstruos y también sentir esa maravillosa sensación cuando un escritor toca algo profundamente humano», explicó Ballingrud en una entrevista.
El folclore como base para hacer terror
Ballingrud no es el único que ha tomado como base para desarrollar sus historias los monstruos, creencias y leyendas del imaginario popular. Por lo tanto, Monsterland no será la única que lo hará, sino que otras ficciones han utilizado el folclore para generar terror y han conseguido gran éxito por ello: desde Territorio Lovecraft, que explora el pasado racista de Estados Unidos, pasando por Expediente X, que utiliza los fenómenos paranormales para construir sus episodios, hasta American Horror Story, que se ha visto inspirada por algunas historias reales.
Respecto al universo de Ryan Murphy, son muchas las temporadas que han incluido la mitología folclórica de Estados Unidos, desde leyendas hasta historias de asesinos, para hacernos pasar miedo. En la primera entrega de American Horror Story, Murder House, ya nos presentaron varios casos reales, que iban desde la matanza de Tate Langdon hasta la muerte de Elizabeth Short, conocida como la Dalia Negra. La tercera, titulada Coven, también incluye casos que ocurrieron en realidad y es que Delphine LaLaurie, el personaje de Kathy Bates, está basado en una asesina que vivió en Nueva Orleans. También lo hace en otras como Freak Show, Hotel, Roanoke y Asylum.
‘Monsterland’ estará disponible completa el 29 de octubre en AXN NOW.