¿Pueden los robots sentir como un humano? Crean la primera ‘piel electrónica’ que imita al sistema nervioso

Liderados por los doctores Yunjie Yang y Francesco Giorgio-Serchi, los científicos de la universidad escocesa de Edinburgo han conseguido desarrollar una tecnología mediante sensores que permite replicar la capacidad de los seres vivos de percibir o sentir su propio movimiento corporal, denominada propiocepción.

Como si de un sistema nervioso se tratase —y gracias a los diferentes conjuntos de electrodos localizados en la superficie del robot—, logran capturar la información de los movimientos y su deformación en las diferentes posiciones.

“Tenemos microcanales formados por metales líquidos, que conducen la respuesta de los diferentes sensores electrodos a un procesador, el cual controla la recolección de señales procedentes de la piel electrónica”, dice Yang.

En dicho procesador es donde se almacena y codifica toda la información útil relacionada con el movimiento que el cuerpo realiza para después transmitir los datos a un ordenador.

Yang detalla que es mediante el aprendizaje automático como se obtiene la percepción 3D y los movimientos.

El propio investigador asegura que no hay ningún tipo de tecnología que hasta el momento pueda proveer información en tiempo real de movimiento e información táctil y que debido a ello la experiencia en Edimburgo les convierte en pioneros.

Este avance abre un abanico de métodos de control de movimientos en el área de la robótica con diversas aplicaciones en el futuro.

De cirugías a gemelos virtuales

La tecnología que el grupo de investigación SMART de la Universidad de Edimburgo está desarrollando es más segura que los robots convencionales y puede ser utilizada en entornos más hostiles, y facilitar tareas más complejas.

La primera de las aplicaciones de las que se puede beneficiar es la industria manufacturera, ya que los robots tienen sentido de sus propios movimientos como son los de la presión e información del tacto

Lo que es útil para el manejo o el uso de objetos frágiles. En esa dirección, la piel electrónica inteligente podría ser utilizada en el sector sanitario.

“Con el movimiento y la información táctil, proveería al doctor un control más preciso, más cercano al nivel de una lupa”, afirma Yang. Esto es algo en lo que ya están trabajando con un endoscopio prototipo, junto con el Consejo de Investigación Médica británico.

Dentro de las líneas de investigación está el uso de esta dermis en robots submarinos. Con ella, sería fácil proveer una completa información del movimiento útil para su control y tareas complejas, en comparación con las cámaras ópticas que tienen difícil capturar el movimiento y formas en el agua.

Futuros usos potenciales

Otro de sus futuros potenciales usos está en la inteligencia artificial: dar vida a copias, gemelos virtuales en el metaverso, una vez conectada a dispositivos móviles.

Gracias a su capacidad de transmitir a tiempo real la información del movimiento pueden proporcionar parámetros relacionados con la salud y lograr una versión virtual del cuerpo mucho más exacta.

“Con el uso de estos dispositivos en el mundo real seremos capaces de registrar nuestras emociones e interacciones con diferentes humanos, y después transmitir esa información al mundo digital”, afirma el investigador.

Aunque el camino contrario también sería posible, ya que las interacciones en el mundo digital entre diferentes humanos digitales pueden ser enviadas a través de la piel electrónica al cuerpo humano en el mundo físico.

Así, en el futuro, con la piel desarrollada por el doctor Yang y Giorgio-Serchi “estaremos estrechamente conectados entre el mundo digital y mundo físico”, concluye.

Apúntate a nuestra newsletter y recibe en tu correo las últimas noticias sobre tecnología.

Explore additional categories

Ponete al día con series, cine y música