De la sierra de Tramuntana a sus mejores playas, Mallorca ha sido escenario de varias series
Mallorca es mucho más que playa. Por supuesto, su litoral es uno de sus principales encantos y la razón por la que tantos y tantos turistas llegan a ella cada año, pero también esconde una gran variedad de paisajes gracias a sus varios parques naturales. Es lo que van a encontrar Miranda Blake y Max Winter (interpretados por Elen Rhys y Julian Looman), los policías protagonistas de The Mallorca Files, que actualmente emite COSMO en España, a lo largo de sus episodios.
‘The Mallorca Files’, mucho más que Magaluf
Dan Sefton, creador de esta ficción de BBC, tuvo la idea sobre un policial protagonizado por una británica y una alemán cuando leyó un artículo en el periódico que explicaba que estos países mandaban a Magaluf a sus propios agentes porque sus ciudadanos se emborrachaban y no hacían caso a la policía española. Ahí fue como pensó en llevar a esta disfuncional pareja a la isla de Mallorca, pero no se quedó solo en los sitios de hotel, piscina y alcohol. «Queríamos mostrar la isla lejos de tópicos turísticos, con historias que se integraran con la autenticidad de la isla: su vino, su comida, su fútbol, la naturaleza cosmopolita de su capital y su interior más íntimo y peculiar», asegura Ben Donald, productor ejecutivo de la serie.
A lo largo de los capítulos, el dúo protagonista visitará alguna de las bodegas del interior de la isla y lugares de la zona centro como Es Trenc o Portals Vells, de la zona de Tramuntana podremos reconocer localizaciones como Sóller, Fornalutx o Sa Calobra, al norte aparecen sitios como Port de Pollença, Son Serra y Muro, mientras que de Palma vemos sitios como el Paseo Marítimo, El Molinar o el Teatre Principal. Y, por supuesto, las cuevas del Drach, uno de los enclaves más visitados de Mallorca también se dejarán ver en la ficción de COSMO.
‘La caza. Tramuntana’, una sierra real y un pueblo ficticio
Después de ambientar su primera temporada en el ficticio Monteperdido, al que se dio vida en distintas localizaciones del pirineo aragonés, la segunda temporada de La Caza optó por un lugar más concreto y reconocible: la sierra de Tramuntana, en Mallorca. Sin embargo, aunque Tramuntana fuese el escenario que le diese título a esta nueva etapa de la ficción de TVE, no se eligió un pueblo concreto para ambientar la trama, sino que se creó un municipio también ficticio.
Así, aunque no se nombre en la serie, el pueblo en el que vemos a Megan Montaner no es otro que Valldemossa. Sus calles y casas son el principal enclave de La caza. Tramuntana, aunque también vemos otros lugares como la playa de Sa Calobra, donde aparece un cadáver, o la Ermita de la Santísima Trinidad de Miramar, donde Dani pintaba sus ángeles y demonios.
‘Turn up Charlie’ y ‘White Lines’, el lado fiestero
Netflix estrenó el año pasado la serie White Lines, que compartía con otra del año anterior, Turn up Charlie, que nos mostraban el lado más bailongo y fiestero de las islas Baleares (además de que no tuvieron demasiado éxito). La primera se suponía que ocurría en Ibiza, mezclando la investigación de un crimen con un viaje de autodescubrimiento de la protagonista, pero lo cierto es que fue rodada prácticamente entera en la isla de Mallorca, simulando ser su vecina.
La noche ibicenca era el escenario de ese lado turbio de White Lines, pero Turn up Charlie tenía un enfoque más ligero: Idris Elba interpretaba a un DJ que tenía que hacerse cargo de un niño y, por supuesto, no sabía manejar la situación. Fortalesa de Pollença, la playa del Mago (Calviá) o la Cala Serena (Felanitx) fueron algunas de las localizaciones que sirvieron a esta serie para crear su propuesta.
‘El infiltrado’ y la mansión millonaria
Nada menos que dos premios Emmy (uno para el compositor español Víctor Reyes) y tres Globos de Oro para su trío de estrellas (Tom Hiddleston, Hugh Laurie y Olivia Colman) consiguió la miniserie de BBC El infiltrado que adaptaba para televisión la novela homónima de John le Carré. Ese infiltrado del título en español (el inglés, The Night Manager, hacía referencia a su otra profesión, la de recepcionista nocturno de un hotel) no era otro que el actor que ahora da vida a Loki en la serie de Disney+.
Hiddleston, en la piel de Jonathan Pine, se veía envuelto en un thriller internacional que tenía parada en Mallorca. En la serie veíamos varias localizaciones que ya hemos mencionado (aquí primero, que la miniserie es de 2016) como Palma, Port Pollença o Cala Deià. Sin embargo, su joya de la corona era una fastuosa villa conocida como Sa Fortalesa y situada en Pollença que fue antaño un bastión militar y que se transformó posteriormente en una mansión de lujo. En 2011, el millonario británico James Lupton pagó unos 40 millones de euros por ella y ahora se alquila para bodas, rodajes y fiestas de alto copete.
‘The Mallorca Files’ se emite los martes en COSMO.